Los hombres me hicieron todo el daño que no fui capaz de superar.
Era como oír sonar trompetas para mi, enamorarse. siempre fallando.
Llegué a un punto en que perdí toda confianza en mi misma y en el mundo.
también en los demás.
y ahora.
solo juego.
No hay comentarios:
Publicar un comentario