Parece que Dios me dice que me lo deje
y yo digo que no.
Todo en mi contra.
Dinero de sobra para pillar nada.
no voy a irme a los barrios de la sombra tampoco.
me jode la vida.
Le pido a Dios que me mande cocaína.
“Solo soy un conjunto de tacos, porros, desórdenes de personalidad y pastillas. No hay más”